Hoy les traigo algo que tiene que ver con el bienestar del cuerpo y del alma!
Ayer estuvimos paseando con Juli en Tunuyán y tuvimos el privilegio de conocer a Mariana Copello. Ella es oriunda de Buenos Aires, psicóloga y especialista en la terapia del agua y Armonización sono terapéutica con Cuencos Tibetanos.
Está de paso por Mendoza y me habían comentado de su terapia.
No saben lo que es? pues yo tampoco lo sabía hasta ese día, pero después de la sesión empecé a interiorizarme sobre el tema.Las vibraciones emitidas por los cuencos tibetanos de sonido se han utilizado durante siglos para fines de curación, para sesiones de meditación y purificación. Según la filosofía, cualquier alteración en la salud física, mental o emocional tiene que ver con un desequilibrio, con una descompensación vibratoria.
Mi experiencia en cuestión fue increíble!! Nos reunimos en Villa Dolce Vita.
El lugar es paradisíaco, y a orillas de un lago extendió una manta, y comenzó la sesión.
Con los ojos cerrados y las palmas abiertas, comencé a escuchar el sonido de los cuencos y sumado a la naturaleza viva, fue una sensación inigualable.
Tuve momentos de conexión con mi pasado, con lo que fui y lo que soy.
Pero lo más importante es que sentí que las angustias fueron saliendo y como ella me explicaba, eso es un poco el fin de esta terapia. Eso que arrastramos y que no liberamos, nos ocupa un lugar tan importante en nuestra vida,que si no lo soltamos, no permite que sigamos avanzando y dejando entrar cosas lindas.
Yo no suelo recurrir a terapias alternativas, pero considero que todo lo que aporte a sentirnos mejor,bienvenido sea! Y esto lo recomiendo !!!
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